4/06/2007

Día diez.

Tengo una máscara, pero no sobre el rostro, sino bajo el rostro. Y dentro de mis venas otras venas con otra sangre, y bajo el eterno color de los ojos otro color de ojos, y en el terreno epidérmico otro terreno inhabitado. Y siendo otro sigo siendo el mismo limeño de Lima que cruza pistas y llega tarde a las citas. Los que dicen ser puntuales siempre encuentran buenas excusas para sus impuntualidades. Y ya son las once, y te vas a dormir.